Hacer mucho ejercicio puede afectar tu salud

Hacer mucho ejercicio puede afectar tu salud

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El ejercicio en exceso puede afectar tu salud. Es un hecho que lo hará. Pero, ¿cómo saber si estoy haciendo mucho ejercicio? Es una pregunta que parece ser sencilla de contestar, pero a veces no es evidente.

Si te lesionas o estás tan fatigado que no te puedes mover, podrías pensar que fue por un exceso de ejercicio, pero es común que una lesión pueda deberse a algo tan simple como un mal movimiento, o al uso de peso excesivo. Cuando decimos que el exceso puede dañarte nos referimos a un estado de salud que no es transitorio. Hacer mucho ejercicio puedo llegar a causarte daños en las articulaciones, tendones, músculos y hasta el corazón.

Entonces, ¿Cuanto ejercicio debes hacer para no dañar tu salud? El tiempo e intensidad dependen de tu estado físico, edad, alimentación y genética. Lo que debes de considerar  siempre que vayas a iniciar por primera vez una rutina de ejercicio es realizar una valoración médica de tu estado de salud y pedirle a un especialista que te asesore en la elección de una rutina de ejercicio de acuerdo a tus necesidades.

Ya sea si llevas mucho tiempo entrenando o lo estás haciendo por primera vez, es importante que aprendas a comprender las señales que tu cuerpo te da. Cualquier malestar que sientas, como mareo, palpitaciones, vista nublada o cansancio excesivo, debes de detenerte inmediatamente.

Por otro lado, si te sientes constantemente con fatiga, cansancio, te despiertas por la mañana con un mayor ritmo cardiaco (aun en reposo), sufres de insomnio, estás desmotivado,  es posible que tengas el síndrome de sobreentrenamiento.

Para evitar lesionarte o sobreentrenarte, es importante que tomes en cuenta los siguientes puntos:

  1. Mantenerte siempre hidratado. La deshidratación puede causarte lesiones en los músculos, calambres y fracturas. Bebe por lo menos ocho vasos de agua diariamente e hidrátate durante tu entrenamiento.
  2. Menos es más. Sabemos lo gratificante que puede llegar a ser el ejercicio. ¡Te ves y te sientes de maravilla!  Pero cuando es excesivo, todo se puede revertir y en lugar de sentirte con energía, te sientes cansado y desmotivado. Disfruta el ejercicio y hazlo con moderación.
  3. Come saludablemente. Tu cuerpo necesita nutrirse con alimentos sanos y naturales para reparar el daño que le ocasionamos al ejercitarnos. Tus músculos necesitan proteínas, necesitas energía de los carbohidratos de lenta absorción y grasas para el buen funcionamiento hormonal. Lleva una dieta equilibrada que incluya todos los grupos de alimentos.
  4. Descansa. Si quieres pasar horas y los siete días de la semana entrenando, te podemos asegurar que en algún momento sufrirás de sobreentrenamiento. Alterna tus rutinas y descansa un día a la semana.
  5. Detente si sientes algún dolor. El dolor es una señal de nuestro cuerpo que nos ayuda a comprender que algo no anda bien. Si sientes dolores en las articulaciones o cualquier otro dolor que experimentes, detente inmediatamente.

 

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