10 cambios pequeños para perder peso este 2019
10 cambios pequeños para perder peso este 2019
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Inicia un nuevo año y como sucede siempre, los propósitos para perder peso son de los más «solicitados». Comenzamos con todo el ánimo y la mejor disposición, y lamentablemente para mediados de enero, esas metas ya fueron olvidadas. ¿Por qué nos cuesta tanto trabajo perder peso? Uno de los principales factores que nos impide continuar con nuestra pérdida de peso, es el no tener un método claro para lograrlo. Sigue estos consejos que te damos a continuación y verás que esta vez, este 2019, SÍ lograrás tu objetivo.
- Duerme mejor. Desde nuestro punto de vista, el dormir entre 7 y 8 horas diariamente debe de ser el primer cambio que tienes que tener si buscas perder peso. La calidad de tu sueño está directamente relacionada con tu peso. Si tienes problemas para dormir y no descansas de manera correcta, cualquier esfuerzo que hagas para perder peso se esfumará como por arte de magia.
- Medita diariamente. Diariamente estamos expuestos a muchos factores que nos pueden generar estrés. El trabajo, el tráfico, la familia, etc., Las situaciones que nos generan estrés no desaparecerán, nosotros tenemos que aprender a manejar ese estrés. La meditación es un práctica que te puede ayudar a manejarlo y vivir una vida más plena y consciente. No es necesario que pases una hora meditando, con que medites 10 minutos al día es más que suficiente. Tus niveles de estrés se reducirán y estarás más consciente de tu alimentación.
- Toma un vaso con agua antes de cada alimento. Ya sea que vayas a realizar una comida completa o solo un snack, desarrolla el hábito de tomar un vaso con agua antes de cada alimento. Por un lado, el agua te hidratará (muchas veces confundimos la sed con el hambre) y te sentirás más satisfecho, por lo que comerás menos.
- Incluye en cada comida una porción de proteína. Las proteínas son muy importantes (al igual que las grasa y los carbohidratos) para el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo. Sin embargo, la mayoría de las personas tienen una dieta baja en proteínas y alta en carbohidratos. Acostúmbrate a incluir una pequeña porción de proteína en cada una de tus comidas. Por ejemplo, si tienes mucha prisa, pueden ser huevos y atún. Si tienes más tiempo, puedes prepararte pescado, pollo o carne roja. Si eres vegano o vegetariano, incluye frijoles, quinoa, espinacas, lentejas, todas combinadas con arroz salvaje o integral.
- No te olvides de las grasas. Las grasas tienen mala reputación en cuanto a perder peso se refiere. Pensamos que la grasa se convertirá en grasa en nuestro cuerpo y por eso las evitamos a toda costa. Nada más equivocado que pensar así. Incluye grasas en tu dieta, por supuesto grasas saludables como las que provienen de las nueces, almendras y semillas.
- Lleva un diario de lo que comes. Adquiere una libreta pequeña y siempre llévala contigo. Cada alimento que consumas (así sea el más pequeño como un dulce) anótalo en la libreta. Muchas veces no somos conscientes de todos los alimentos que consumimos durante el día y después nos preguntamos el por qué no perdemos peso.
- No vayas al supermercado con hambre. Come algo antes de ir a comprar. Si vamos con hambre, puedes estar seguro que comprarás alimentos con muchas calorías y pocos nutrientes. Y también probarás todo lo que está en degustación.
- No tengas en tu casa alimentos que no debas de comer. Sabemos lo difícil que puede llegar a ser el tener a varios miembros de una familia y que cada uno de ellos quiera tener sus propios alimentos. Sin embargo, aunque el resto de tu familia estén aparentemente delgados y por esa razón se den «permisos» de comer comida chatarra o industrializada, no quiere decir que estén saludables. Habla con ellos y lleguen a un acuerdo para que la mayoría de los alimentos que tienes en casa sean naturales y saludables. Si por más que les pediste, ellos quieren continuar con comida poco saludable, por lo menos tú no tengas alimentos que no debas comer y que sepas que te gustan mucho. En su lugar, llena tu alacena de nueces, almendras y semillas y tu refrigerador de fruta y verdura picada.
- Toma un jugo verde todos los días. Otra de las razones por las que comemos es exceso, es por que estamos mal nutridos. Pensamos que las galletas, pizzas, papas, etc., nos van a aportar nutrientes y lo único que hacen es aportarnos calorías vacías. Incorpora un jugo verde a tu día. Tómalo a la hora que quieras, pero incluye en el vegetales de hojas verdes como la espinaca, acelga, col rizada, berro, pepino, apio, perejil y nopal.
- Un paso a la vez. Realiza cambios pequeños, que no te generen ansiedad o estrés. Ten en mente tu meta de largo plazo, pero no te olvides que para llegar a esa meta, debes de dar pequeños pasos todos los días.
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