Alimentación para un abdomen definido
Un mito muy popular es que la grasa que comemos se almacena. Esto no es cierto. Lo que se almacena como grasa es el exceso de moléculas de glucosa y similares producto de una dieta rica en nutrientes. El exceso es lo que se transforma en grasa.
Lo que tenemos que hacer es revertir el proceso: debemos comer menos (menos energía) y mantener nuestros niveles de glucosa en la sangre ligeramente bajos, para que nuestro cuerpo metabolice las grasas almacenadas, las convierta en glucosa y nuestros músculos usen esos nutrientes. Esto no será fácil.
Requeriremos de mantener nuestras células musculares hambrientas y para esto, lo mejor es el ejercicio físico intenso. Al vaciarse las reservas de energía en los músculos, estos buscaran en el torrente sanguíneo la energía necesaria y el proceso de perder grasa estará en marcha.
La clave para tener éxito en este proceso y en el largo camino hacia unos músculos abdominales definidos es la persistencia. Reducir 10 gramos de grasa corporal todos los días, junto con unos músculos fuertes son la combinación que buscas.
Por otra parte, puedes fortalecer tus músculos abdominales, pero te advertimos que si lo que buscas es que se vean, lo más importante, por mucho, es tu porcentaje de grasa corporal.
La clave, como en muchas cosas en la vida es la persistencia.
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