Cómo el azúcar cambia tu estado de ánimo
Cómo el azúcar cambia tu estado de ánimo
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Todos en algún momento hemos experimentado lo que el azúcar le hace a nuestro estado de ánimo. Solo recuerda cuando te comiste esa rebanada de pastel, la energía que sentiste al principio, como llegaste a sentirte content@ y alegre, para después, tener un bajón tipo montaña rusa. Y es precisamente esos altibajos que nos genera el consumo de azúcar, lo que a la larga nos puede llevar a sufrir de depresión o ansiedad.
Los especialistas mencionan que a pesar de que nuestro cerebro necesita glucosa, las cantidades exhorbitantes de azúcar que en la actualidad le damos a nuestro cuerpo, nos hacen más mal que bien. Y es que la mayoría del azúcar que consumimos, no provienen de los alimentos naturales, por ejemplo, de las frutas. Si comiéramos solamente frutas, nuestro cuerpo sabría como utilizarlas, sin embargo, lamentablemente el consumo de azúcar que tenemos proviene de azúcar y carbohidratos refinados, es decir, únicamente te estás llevando a la boca azúcar, sin ningún nutriente.
Cuando comemos alimentos con alto contenido de azúcar, generamos en nuestro cuerpo picos de insulina, que te pueden ocasionar mareos, fatiga, cansancio, ansiedad, estrés, somnolencia, etc.,
El consumo excesivo de azúcar, también te lleva a una inflamación general de tu cuerpo, afectando todos tus órganos, entre ellos el cerebro. Existen estudios que relacionan los niveles de inflación del cuerpo, con problemas de depresión.
Así mismo, te puedes volver dependiente de su consumo, ya que el azúcar puede llegar a ser igual o más adictiva que la cocaína. Por eso, nos cuesta tanto dejar de comer alimentos y bebidas azucaradas.
Muchas personas asocian el comer alimentos azucarados con estados de ánimo (seguramente te viene a la mente una película romántica, en donde la protagonista se siente triste y corre al congelador por un litro de helado o por un chocolate), pensamos que después de comer algo dulce, nos sentiremos mejor, y seguramente será así, pero también estaremos metiéndonos en un círculo que a la larga, nos costará mucho trabajo salir.
- Lo mejor que puedes hacer, es evitar o limitar tu consumo de azúcar refinada.
- Mantén tus niveles de glucosa bajos. Eso te procurará un estado de ánimo más equilibrado, sin tantas subidas y bajas emocionales.
- Consumo alimentos ricos en nutrientes. Dile adiós a las calorías vacías. Procura llevar una dieta equilibrado en donde la base sean las verduras, la grasa saludable y las proteínas.
- Ejercítate. El ejercicio es fundamental para equilibrar tus hormonas, te sentirás lleno de energía y vitalidad, y no será necesario el consumo de azúcar.
- Limita el consumo de alimentos industrializados. Están llenos de calorías vacías, grasas hidrogenadas, azúcar refinada, sal y muy pocos nutrientes.
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