Errores más comunes al ejercitarte en casa
Errores más comunes al ejercitarte en casa
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Ahora que tenemos la necesidad de buscar opciones para ejercitarnos en casa, debemos de hacerlo tomando todas las precauciones para no lesionarnos y al mismo tiempo, obtener los mismos beneficios que lográbamos cuando nos ejercitábamos en un gimnasio o al aire libre. Toma nota de los errores más comunes que podemos llegar a cometer al ejercitarnos en casa, y logra tus objetivos.
- No utilizar todos los recursos disponibles. Muchas veces, nos negamos a ver todas las oportunidades que tenemos a nuestro alrededor y eso incluye todos los recursos disponibles que puedes tener en tu casa para ejercitarte. Simplemente nos quedamos con la idea de que «en el gimnasio» si tenía unas pesas, o una escaladora, etc., Cuando ampliamos nuestra mente y nos permitimos explorar nuevas cosas, descubrimos que podemos llegar a ser muy creativos. Por ejemplo, subir y bajar un escalón, o después alternar con dos escalones, puede hacer fácilmente al trabajo de una escaladora. Utilizar botellas con agua de distintos pesos, puede ser otro recursos. ¿Qué te parece utilizar una caja de plástico como step? ¡Utiliza tu imaginación y los recursos estarán disponibles a la vista!
- Realizar más ejercicio de que estás acostumbrado. Al igual que en el gimnasio, si te sobreentrenas, puedes llegar a lesionarte. No por que sean ejercicios en casa, quiere decir que sean con menor intensidad, recuerda que lo único que cambia es el lugar. Así que tómatelo con calma y más si te estás iniciando con el ejercicio. Comienza con pocas repeticiones de una o dos series, realiza rutinas para principiantes, etc., Debemos de aprender a escuchar y a respetar a nuestro cuerpo y el no excederte es parte de ese amor a nosotros mismos.
- No establecer el ejercicio como una prioridad. Establece horarios y pídele a tu familia que por favor respete ese tiempo y espacio que quieres dedicarlo para ti. También puedes invitar a otros miembros de tu familia a que se ejerciten juntos, lo importante es que vean el ejercicio como una prioridad fundamental para mantenerse sanos y en forma.
- No ser constante. A veces, la constancia viene de una «fuerza» externa (puedes llamarlo entrenador, el gasto que haces en un gimnasio, tus amigos, etc., ) que nos impulsa a ser constante. Cuando no tenemos a nadie que nos esté diciendo que debemos de ser constantes, simplemente dejamos el ejercicio a un lado. Ahora, debemos de aprender a ser constantes por nosotros mismos. Es una tarea difícil, pero no imposible. Establece horarios, días de la semana para entrenar y un plan de entrenamiento.
- Realizar incorrectamente el ejercicio. Sin la ayuda de un entrenador que nos diga cómo realizar el ejercicio, ahora nosotros debemos de hacernos responsables de observar cómo se realizar correctamente un ejercicio. Afortunadamente, hay miles de videos en Internet con tutoriales de cómo hacer correctamente los ejercicios. Si están haciendo alguna rutina por Internet, te recomendamos que primero que veas completa sin realizarla, para que observes cómo se hace correctamente y después comiences el ejercicio.
- Olvidarte de la rutina de pesas. Sabemos que hay más ofertas de videos y entrenamientos de cardio que de pesas, pero es muy importante que no te olvides de utilizar un poco de pesas y hacer ejercicios de preferencia compuestos, es decir, que incluyas todos los grupos musculares. Sentadillas, desplantes, lagartijas, etc., con o sin peso. Ejercitar nuestros músculos nos ayudará a mejorar nuestra postura, a evitar lesiones, a acelerar nuestro metabolismo, entre otros muchos beneficios.
- No descansar. Es necesario descansar uno o dos días a la semana. Así como estableciste horarios y rutinas para ejercitarte, también debes de establecer los días que descansarás. Recuerda que el ejercicio te ayudará a vivir una vida mejor, más plena y llena de energía, siempre y cuando lo realices con responsabilidad y cuidado. El descanso es igual de importante y tu cuerpo lo necesita para recuperarse y así evitar lesionarte.
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