La principal razón por la que recuperamos la grasa perdida

Lo primero que tienes que hacer es ser consciente de las causas de las que hablamos en la primera parte de este artículo, esto ayudará mucho a llevar el proceso. Por otra parte, es necesario reconocer que cambiar de hábitos requiere de visión, determinación y un plan de acción. Si falta un ingrediente, todo puede fallar.

La clave para hacer lo que parece imposible es hacer lo que es posible. Cambia un hábito a la vez y hazlo de manera gradual (pero con determinación y claridad). Te vamos a dar un ejemplo:

Tú sabes que esa golosina que te gusta comer después de tus alimentos podría ser un factor importante en el hecho de que tu dieta tenga un exceso de energía. Bueno, el primer paso es identificar esos hábitos «problema» y diseñar una solución.

En este ejemplo vamos a cambiar una golosina por una fruta. ¿Vas a escoger la fruta que menos te gusta? Obviamente no. Comienza cambiando la golosina por la fruta que más te satisface.

La voluntad es como un músculo que se va fortaleciendo cuando hacemos uso de su poder. Cambia un hábito y verás como la sensación de estar en control de tu vida te dará la energía para hacer más cambios posibles. Cuando voltees para atrás verás que no ha sido tan difícil.

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