¿Por qué una «cheat meal» o «comida trampa» me puede ayudar a seguir perdiendo grasa?
¿Por qué una «cheat meal» o «comida trampa» me puede ayudar a seguir perdiendo grasa?
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Si no las conoces, las «comidas trampa» o «cheat meals» son interrupciones en una dieta muy restrictiva en donde te tomas unas breves «vacaciones. Son muy comunes en fisicoculturistas y fitness models que buscan perder los últimos kilos de más.
Si tu tienes más de 10 kilos de más esta práctica no te será de mucha utilidad ya que se trata de una técnica avanzada y sólo quienes conocen muy bien sus impulsos de hambre y tienen mucho control sobre lo que comen la podrán hacer correctamente.
Para la mayoría de las personas cambiar algunos alimentos por opciones más saludables y reducir ligeramente su ingesta calórica será suficiente para perder peso y lo lograrán más saludablemente.
Pero ¿Cómo hacer una «cheat meal» correctamente?
Primero, tenemos que entender que es una «cheat meal». Es una comida especial que hace una persona que lleva una dieta muy restrictiva, generalmente en carbohidratos, pero también puede ser en calorías en general.
Por ejemplo. Una persona come de lunes a sábado una dieta basada en pollo, carne, pescado, verduras, leguminosas y pocas nueces. Es una dieta con pocos carbohidratos (algunas verduras y leguminosas contienen carbohidratos complejos de lenta absorción, pero en cantidades moderadas, al igual que las nueces).
El cuerpo de esta persona del ejemplo empezará a adaptarse a la restricción de carbohidratos y para mantener la energía disponible para las células en forma de glucosa sanguínea comenzará a metabolizar las reservas de energía de la grasa corporal.
Pero, como medida de protección, comenzará a reducir el ritmo al que consume estas reservas. Tiene mucho sentido ya que es un mecanismo de supervivencia primitivo. Tu cuerpo detecta la falta de nutrientes en tu dieta y se adapta para sobrevivir en lo que percibe un ambiente con carencia de nutrientes.
Sin embargo, si quieres seguir perdiendo grasa, tendrás que «engañar» a tu cuerpo, haciéndole «pensar» que no hay una restricción.
Es aquí donde las «comidas trampa» funcionan. Si el sábado por la noche, la persona de nuestro ejemplo come algo muy diferente a su dieta, por ejemplo una pizza con mucho queso y harina refinada (que aumenta enormemente la glucosa sanguínea) el sistema endócrino (las hormonas) se adaptará a la nueva situación y el cuerpo dejará de cuidar las reservas porque percibirá que hay alimentos suficientes.
Recuerda que una «cheat meal» es algo programado con muchos días de anticipación, no es el nombre que le das a una comida en la que te dejaste llevar y olvidaste tu propósito de perder grasa.
Algunos autores recomiendan entre una y tres «comidas trampa» a la semana. Entre más comidas de este tipo realices por semana, deberán ser más moderadas para evitar que tu promedio de ingesta calóricas se eleve demasiado y no pierdas grasa.
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